lunes, 5 de septiembre de 2011

villa quiere dejar su huella en Cruz azul


El 'Tito' habló en exclusiva con Central Deportiva, en una charla en la que dejó ver su lado más humano y su agradecimiento con la institución cementera.


Ciudad de México. Desde el estacionamiento de Cruz Azul, en la Noria, nos observó y nos hizo la seña de que ya estaba listo para la entrevista. Emmanuel Villa lucia apresurado, pero de igual manera nos llevó hasta el rincón más lejano de la cancha donde él entrena, era como un tipo de parque, con kiosco y fuente, muchas flores nos rodeaban, y en un instante dijo; “aquí esta perfecto”.

Para que el delantero cruzazulino se sintiera como en casa, decidimos llevar comida típica argentina; facturas (pan dulce), alfajores y pasta frola; en cuanto la vio, un suspiro salió de su boca y comentó; “uyy, todo esto que esta aquí me fascina, ¿cómo lo corto, con la mano?, lo que no coma me lo llevo a casa eh, mi esposa se va a sorprender cuando le lleve todo esto”.


El tema principal, por obvias razones, fue Cruz azul; “cuando me dijeron que venía acá con el profe Meza ni lo pensé y me doy cuenta que hace falta tanto un título, uno toma la responsabilidad del club, así que lo tomó como propio, aunque hay jóvenes que ya son realidades, como Javier Aquino, todos le decimos que ya no es una promesa, es una realidad, que en cualquier momento te cambia el rumbo de un partido”.


Nos sentamos, empezó a preparar mate (té tradicional de Argentina), y de inmediato me ofreció, con un sabor medio amargo le di un par de tragos y se lo regresé, al poco rato preparó más y dijo; “este sí te lo tomas todo el otro me lo dejaste a la mitad, me lo tomé yo, pero todo bien, anda tómalo, fíjate que en el vestidor entre Chaco, el profe Ipata y yo tomamos siempre mate”, y ni modo así es esto de las entrevistas, hay que sacrificarse de vez en vez.


Cruzo la pierna y comenzó la charla; “Yo siempre admire mucho a Gabriel Omar Batistuta, él ha sido siempre un ícono muy importante para mí, Batistuta tenía una pierna derecha que te rompía el arco, era súper profesional nunca salía en ningún lío, desde chiquito lo admiro, es mi modelo a seguir, y fíjate que nunca tuve la oportunidad de cruzarme con él”.


Lo primero que probó fue la pasta frola, un tipo de pay hecho con membrillo y con una risa nerviosa asintió; “es mala costumbre hablar con la boca llena pero como estamos haciendo una nota no puedo tragar, comer, en fin, además espero que mañana no nos vayan a subir a la bascula, esta riquísimo, ¿dónde lo compraron?, tienen que darme la dirección, ¿Será que lo llevan a domicilio?”, claro le dimos todos los datos, y empezó a recordar historias curiosas que lo marcaron como persona y jugador.


“Me quedo mucho con un día que saliendo de la Noria dos chamacos me dijeron ‘Tito vas para Perisur’ y yo les dije que sí, que si querían un aventón, a mi no me cuesta nada y ellos estaban felices, así que me los lleve, y me decían ‘no sabes, nos has hecho el día’, venían filmando con su celular y sí uno genera eso, ¿por qué no brindarlo más a menudo?, digo, tampoco se trata que cada vez que salga de un 'ray' hasta Perisur, pero ese día se dio”.


Su carrera futbolística en México no ha sido fácil y batallo mucho para no descender con sus primeros equipos; “estuve en equipos que luchaban mucho, era mirar todo el tiempo la procentual, no siempre fue así, por que llegue a Rosario Central en mi país, un equipo con un estadio único y gente impresionante, aunque ya aquí llegue a Atlas y de nuevo regrese a la pelea del descenso, cuando paso a Tecos se repite la misma historia, así que bueno, llegue a Inglaterra y sucedió lo mismo, 7 puntos en 19 jornadas tenía el Derby”.


No podía dejar de lado su realidad con la institución azul y sus ojos mostraron sinceridad y emoción mientras hablaba; “yo siempre estuve en clubes con situaciones difíciles; Atlas, Tecos, hasta en Inglaterra, pero cuando llegue a Cruz Azul fue pelear por cosas lindas y eso era espectacular, es una experiencia hermosa, tenemos que conseguir un título y a mí me queda un año, aunque me gustaría quedarme aquí mucho tiempo, no me quiero ir sin dejar una huella”.

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