La Máquina falló en honrar con una victoria sobre Chiapas al ex lateral derecho, tristemente asesinado hace apenas unos días.
El cuadro cementero se conformó con el “puntito” de visitante. No quiso revertir una injusticia de verse empatado a un gol en fuera de lugar de Ismael Fuentes (58’).
Fue un conjunto que terminó abatido por el calor de “La Selva”. El cambio de horario impuesto por la televisora para que “la afición viera a la Selección Sub-20” terminó por pesarle a los de Enrique Meza.
Cruz Azul empezó con el ímpetu de querer dominar el juego, de agobiar el marco defendido por Édgar Hernández. Quisieron el triunfo... durante los primeros 10 minutos.
Luego llegó el cansancio. Demasiado pronto, pero ya habían contado con la fortuna de irse arriba en el marcador, gracias a un autogol de Jesús Chávez (5’).
Emanuel Villa, errático y lejos de la portería rival. Javier Orozco desparecido y confundido, cada vez que tuvo la pelota frente al marco contrario.
Dio la impresión de que los de La Noria apelan cada vez más a la suerte para rescatar los puntos que a un buen futbol como el que quiere su afición.
Era una versión muy pálida de los capitalinos ante unos Jaguares que sólo intentaron a la pelota parada para generar ocasiones de peligro.
Enrique Meza, el técnico celeste, daba gritos y manoteos a sus jugadores. 90 minutos se desgastó en la humedad y el intenso calor chiapaneco.
El dominio cementero se diluyó de a poco. Contaron con la inclusión de un Yosgart Gutiérrez inspirado durante la primera parte.
Sacó todos los embates naranjas. Se lució para despejar dudas acerca de su capacidad bajo los tres postes.
Incluso hizo que la nostalgia por Jesús Corona fuera menos.
Sin embargo, el resto del cuadro celeste sigue con su eterna súplica para que ya vuelva Christian Giménez. Todavía esperan otra jornada sin él, aunque el respaldo de ocho puntos en cinco encuentros del Apertura 2011.
La segunda mitad fue dormilona. Cruz Azul y Jaguares, de a poco se fueron conformando y se dedicaron más a la búsqueda de los errores contarios que a las virtudes propias.
Debutó el delantero colombiano Edixon Perea para La Máquina y tampoco pasó demasiado. Se le nota la inactividad que tuvo durante varias semanas con Las Palmas, del futbol español.
El 1-1 gustó en ambos bandos. Al final del encuentro, las dos escuadras salieron empapadas en sudor, contentas de que el juego se acabara en condiciones climáticas adversas.
El punto sirve a Chiapas para sumar en su lucha por alejarse del descenso; a Cruz Azul, para mantener la media inglesa de ganar en casa y empatar fuera, con el fin de acceder a la Liguilla.
Ignacio Flores, desde el cielo, observó a su amado equipo, con el que vivió épocas de gloria. Quiere que su muerte sirva de motivación para que La Máquina alce por fin el título y mejore actuaciones como la de ayer.
En esa tarea, Nacho no quiere que los celestes se tarden mucho tiempo más.
vía el universal.com.mx
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